A los 3 años se produce un cambio muy importante en la vida de nuestros pequeños y es que es a esta edad cuando dicen adiós a la escuela infantil para dar un paso más en etapa educativa: el paso al cole de mayores.
Este es un momento muy emocionante para los niños y también para nosotros como padres. El final de la etapa en la escuela infantil viene acompañado por un sentimiento de nostalgia de lo que dejan atrás y, por otro lado, genera en muchos niños un miedo a lo desconocido.
Al fin y al cabo, esto supone dejar atrás el ambiente más familiar de una escuela infantil, donde hay menos niños y todos se conocen, a un colegio donde habrá muchos más compañeros y las rutinas están más establecidas.
Por ello, te ofrecemos algunos consejos que pueden ayudar a toda la familia a afrontar este cambio y que los primeros días de colegio transcurran de la mejor manera posible.
Consejos para afrontar el cambio de la escuela infantil al cole de mayores
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Empatiza con tu hijo, habla con él de esta nueva etapa de una forma muy positiva, de todas las cosas buenas que allí va a encontrar, de todo lo que va a aprender y los nuevos amiguitos que conocerá y muéstrale todo tu apoyo y confianza en que va a hacerlo muy bien.
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No anticipes en exceso la vuelta al cole. Los niños pequeños no tienen concepto del tiempo y no saben si septiembre es dentro de mucho tiempo o mañana mismo. Por tanto, hablarles de comenzar el colegio con mucho tiempo de antelación puede generarles una ansiedad innecesaria.
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Lo ideal es que previamente al inicio del curso, puedas llevarlos al centro escolar para que puedan ir familiarizándose con el lugar y pierdan ese miedo a lo desconocido. Que tengan una idea de cómo va a ser su clase, el patio del recreo donde van a jugar o la puerta por donde entrarán y saldrán cada día del colegio es de gran ayuda. Si el centro dispone de escuela de verano es un momento ideal para hacerlo.
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Id juntos a comprar el material escolar que vaya a necesitar. Siempre se puede aprovechar para comprarles algo que les haga especial ilusión: una mochila de sus dibujos favoritos, un estuche con muchos lápices de colores que él mismo elija, etc. Esto les ayudará a sentirse partícipes del proceso y a esperar con ilusión el día en el que puedan estrenarlo.
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Los primeros días en el cole de mayores suelen ser de adaptación y el niño acudirá solo durante algunas horas para, poco a poco, ir aumentando el horario. Estos primeros días, aprovecha para in creando una rutina de horarios en la que, cada mañana, haya tiempo suficiente para levantarse, vestirse, desayunar, etc, sin prisas ni agobios.
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Objetos de apego. Deja que, durante los primeros días, tu hijo lleve, sí así lo desea, su juguete favorito o aquello que le resulte familiar y le haga sentirse más cómodo o con mayor apego a su hogar. En muchas ocasiones, llevar consigo un objeto de casa les hace sentir más seguros.
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Despedidas rápidas y cariñosas. Los primeros días de colegios también es muy difícil de afrontar el momento de la separación, tanto para los padres como para los niños. Por este motivo hay que evitar prologar las despedidas. Debemos transmitir seguridad y tranquilidad a nuestros hijos en el momento de dejarlos en el colegio y hacerles ver que pronto irás a recogerles, que el colegio es un lugar seguro para ellos y que se lo pasarán genial.
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Es conveniente que, durante los primeros días, sea el papá a la mamá quienes vayan al colegio a llevarlos y recogerlos. Esta rutina les generará confianza y hará que se acostumbren antes al cambio.
Es totalmente normal que nuestros hijos lloren los primeros días de colegio. Cada niño es diferente y necesitan tiempo para adaptarse. Poco a poco irán haciéndose a la rutina y descubriendo nuevas experiencias que le harán agradable su estancia en el cole de mayores.
Conseguir una adaptación feliz puede ser más fácil si nosotros, como papás, estamos a su lado, acompañándoles y mostrándoles el enfoque más positivo.
Joana Casas
