Potencia las habilidades de tu hijo a través de la pintura

El dibujo es el medio de expresión no verbal que utilizan los niños de todas las edades. Al dibujar y colorear, el niño expresa sus emociones y sus sentimientos. Tanto es así que el uso de los colores, los trazos o las dimensiones de sus dibujos pueden ser un indicador de su estado de ánimo o podemos llegar a intuir cuál es su opinión respecto a un tema o cómo ve a una determinada persona.

A través de los dibujos, los niños plasman sus fantasías. Ellos imaginan algo y lo plasman sobre el papel, contribuyendo así a estimular habilidades como la creatividad, la comunicación, la sensibilidad o su capacidad de expresión.  

Beneficios de la pintura en los niños:

1. Fomenta la comunicación y la habilidad a la hora de expresarse. A los niños les puede resultar complicado expresar con palabras su opinión o sus sentimientos respecto a un tema y, para ello, recurren a otras formas de expresión como puede ser la pintura o el dibujo.

A través de las formas y los colores son capaces de mostrar sus sentimientos más ocultos. De hecho, el dibujo se utiliza como terapia en casos de niños con dificultades para comunicarse o incluso, en los casos en los que los niños son muy tímidos, a través del dibujo consiguen canalizar esos sentimientos y dar rienda suelta a la imaginación.

2. Mejora su motricidad e incentiva su curiosidad. Al utilizar pinturas, pinceles y lápices, el niño aprende a controlar los movimientos de su mano y las infinitas posibilidades que ofrece el dibujo, les ayuda a desarrollar su curiosidad e imaginación ante las cosas.

3. Les ayuda a relajarse. Pintar es placentero y les gusta, es divertido. Por ello, unos folios y unos cuantos colores son suficientes para que tu hijo se relaje y deje volar la imaginación.

4. Canaliza los conflictos internos y las emociones negativas. Hay ocasiones en las que nuestros hijos pueden sentir miedo ante una situación o pueden sentirse tristes, disgustados por algo y no se atreven o no pueden expresarlo con palabras. Como ya hemos comentado anteriormente, a través del dibujo se deja fluir los sentimientos y mostrar el estado de ánimo.

5. El último y no menos importante, incentiva su creatividad. Los niños son capaces de dibujar cualquier cosa. En el dibujo no existen normas ni modelos, sino que es la espontaneidad y la imaginación de cada niño lo que marcarán el estilo de cada dibujo. Haz la prueba, coge un grupito de niños de la misma edad y pídeles que pinten una casa, por ejemplo; algo sencillo, verás que el dibujo puede tener elementos parecidos pero no habrá ninguno igual; cada uno ve la realidad a su manera.

Si tu hijo se siente atraído por las actividades artísticas, poténcialo. Hay múltiples opciones de hacerlo. En el Colegio disponemos, por ejemplo, de actividades extraescolares relacionadas con el dibujo y otras formas de expresión artística.

Busca siempre actividades artísticas acordes a la edad y los gustos de tu hijo. Pregúntale qué es lo que le gusta hacer; solo así se sentirá motivado y le gustará asistir, en el caso de que estés pensando en apuntarle a clases.

En casa, puedes buscar un rinconcito donde él pueda para llevar a cabo sus creaciones utilizando diferentes materiales (pinturas, plastilina, arcilla), explorando su mente y descubriendo por ellos mismos qué es lo que quieren dibujar.

Joana Casas